Aunque a todas nos gusta pasear por Zara (aunque solo sea para ver las novedades), comprar online cada vez es una experiencia más placentera, práctica y cómoda. Además de las razones obvias, como que puedes comprar desde tu casa estando en pijama, os voy a contar lo bien que me ha ido con mi última compra online en Zara. Es lo que tiene tantos días seguidos de fiesta, que una solo puede encender el ordenador en lugar de ir al centro comercial, y la tentación es muy alta.
La verdad es que me ha gustado tanto la experiencia de compra online (hacía bastante que no compraba por internet en Zara, últimamente solo compraba en la tienda), que repetiré mucho más. Os cuento las razones que quizás nos conoces sobre las ventajas de comprar online en Zara:
* Envíos gratis a casa a partir de 30 euros. Solo hace falta que hagas un pedido un poco grande para que no te cueste nada tenerlo en casa. Y en 24-48 horas ya lo tienes en casa.
* Devoluciones gratis desde casa ¡y te viene un mensajero a recogerlo! Esto ha sido sin duda lo que más me ha molado. Compré de más, pensando, bah, ya lo devolveré en la tienda, que no me cuesta nada y he visto que hay una opción para que un mensajero te lo recoja en la misma caja del envío. También tarda solo 24-48 horas en venir a buscarlo.
* Zara tiene un nuevo sistema para averiguar tu talla (basado en la experiencia de compra de otras personas), con la que casi es imposible equivocarte. De hecho, compré un vestido de cuadros vichy de Zara Trafaluc y por si acaso, compré tanto la M como la L, porque la línea juvenil siempre tiende a ser más estrecha. Y la M, que era la recomendación para mí, efectivamente, era mi talla.
* Además de recogerte las devoluciones, puedes colaborar con Zara por el reciclaje. Ellos se llevan la ropa que ya no usas, ya sea de Zara o no, para donarla a Cáritas, Cruz Roja y Oxfam. Así contribuyes a cuidar el medioambiente y a ayudar a los que más lo necesitan. No te dan cheques descuentos, y solo te recoge el mensajero la ropa si haces pedido online, pero me parece una iniciativa muy buena, que te evita tener que llevar la ropa usada al contenedor de reciclaje.
* Si te gusta una prenda y no tienen tu talla, te avisan al email cuando por fin la tienen en stock.
* Todas esas ventajas hicieron que mi compra online fuera mucho más grande de lo que me pensaba quedar, pero así pude probarme con tranquilidad y comodidad en casa, sin tener que esperar colas en el probador, para decidirme por lo que más me había gustado de todo, como el kimono estampado de la portada, el vestido de cuadros azul y una mochila gris.
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